Para introducirnos en el apasionante mundo de la prehistoria del Alto Aragón, nada mejor que iniciar esta ruta en Colungo visitando el Centro de Interpretación del Arte Rupestre. En él encontraremos toda la información necesaria para dirigirnos a los diferentes abrigos con pinturas rupestres existentes en el cañón del río Vero y conoceremos las claves que permiten comprender la evolución de los pueblos primitivos y sus manifestaciones culturales. Tampoco debe faltar un paseo por las estrechas y laberínticas callejuelas que envuelvan la gótica iglesia parroquial, dedicada a Nuestra Señora del Pilar.

En Colungo tomaremos la carretera A-2205 en dirección a Arcusa. Su serpenteante trazado nos permitirá disfrutar de un paisaje de gran belleza, donde los conglomerados, vestidos de encinas y madroños, son atravesados por profundas gargantas como la de Fornocal.

Poco antes de llegar al collado de San Caprasio, a 9 km de Colungo, se encuentra el punto de inicio del sendero que conduce a los abrigos de Arpán y a la cueva de la Fuente del Trucho.

Un poco más arriba, junto al barranco de Portiacha, existe un mirador llamado el Mirador del Vero, con amplio aparcamiento, donde puede disfrutarse del impresionante y salvaje cañón del río Vero y desde el que podremos acceder a los abrigos del Tozal de Mallata. Tras admirar las pinturas rupestres existentes en estos abrigos, que también cuentan con servicio de visitas guiadas, resulta de gran interés continuar avanzando con el coche por la misma carretera. 

Ya en la comarca de Sobrarbe continuaremos nuestra ruta en dirección al pequeño pueblo de Lecina, que ha sabido conservar un conjunto urbano de gran belleza y con sabor medieval. No debe faltar la visita a su afamada encina milenaria, a la que se accede, en tan sólo 10 minutos, por un sendero que parte de la plaza del pueblo. También hay que dirigirse a esta misma plaza, donde se encuentra la oficina de turismo, para tomar el sendero que se dirige a los covachos de Barfaluy.

Ya de regreso hacia Colungo puede completarse esta interesante ruta visitando la pequeña población de Asque, desde la que pueden realizarse diferentes excursiones, como visitar el abrigo con pinturas rupestres de Regacens o el Puente de Diablo sobre el barranco de las Gargantas.

Finalmente se llega al punto de inicio, Colungo. A escasos 1.000 m del pueblo y en dirección a Barbastro, puede dejarse el coche junto a una granja; será necesario atravesar la carretera y subir por un pequeño terraplén para acceder a un campo de almendros donde se encuentra el olivo milenario de Nadal.

Desde Alquézar o Radiquero también pueden iniciarse otros recorridos a pie, con el fin de visitar las pinturas rupestres de los abrigos de Chimiachas y Quizans, pasando por la pequeña población de San Pelegrín.